El árbol de navidad

Publié le par Lucile ERB

El mes de noviembre es uno de los más tranquilos del año. Ya ha pasado el jaleo de la vuelta al cole, todavía no ha empezado el de Navidad y los estrasburgueses se enfrentan al gris y a la tristeza del cielo. Por lo tanto, cualquier tema un poco divertido tiene éxito. Así que el árbol de Navidad ocupa todos los medios de comunicación alsacianos.

Y estos últimos años, ¡divertido lo ha sido! Un año no le gustaba el color de las luces a la gente, otro año fueron los adornos que no les gustaban a los estrasburgueses. Otro año, el árbol se parecía a la Torre de Pisa, inclinándose y dando la impresión de que iba a caer. Al final no se cayó.

Pero él que pasará a la Historia será el árbol del 2017. El primer árbol destinado a la plaza Kleber de Estrasburgo se rompió cuando fueron a recogerlo. El segundo sí que fue instalado pero unos días después notaron un agrietamiento y por cuestión de seguridad tuvieron que cortarlo. Regalaron los trozos a la gente… de recuerdo. Nunca hay dos sin tres… El tercer árbol sí que se quedó.

A pesar de todo, el árbol de Navidad, con sus 30 metros, siempre ha sido un orgullo para los estrasburgueses. Es uno de los más altos de Europa. Lo suelen recoger en un bosque de los Vosgos.

La tradición del árbol de Navidad se remonta a tiempos inmemoriales. Alsacia es la cuna del árbol de Navidad. Se encuentra una primera mención del árbol en la biblioteca humanista de Sélestat (pueblo alsaciano) en el siglo XVI. Al principio simbolizaba el árbol del paraíso. Por eso se decoraba con manzanas. Luego los adornos evolucionaron.

Al principio solo se encontraba esta tradición en Alsacia y en otros países protestantes como Alemania. Se enfrentaba a la tradición católica de las figurinas del belén. Pero después de la guerra de 1870, muchos alsacianos dejaron la Alsacia prusiana y se fueron a otras partes de Francia; exportaron así esta tradición.

Publié dans Alsacia

Pour être informé des derniers articles, inscrivez vous :